04/04/2011 - ABC - Cataluña - Cien días bajo la amenaza de las tijeras de Mas

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Cataluña
Cien días bajo la amenaza de las tijeras de Mas
Publicado 04/04/2011
IVA ANGUERA DE SOJO
BARCELONA

La crisis económica ha marcado la primera etapa de CiU ante una oposición desaparecida

Mas ya advirtió que la vía para salir de la crisis sería dolorosa

La imagen de plantas hospitalarias cerradas y habitaciones reconvertidas en áreas administrativas se ha convertido en la metáfora de los primeros cien días de Artur Mas al frente de la Generalitat. Los recortes son para todos, excepción hecha de las embajadas, más imprescindibles al parecer que el Metro hasta el aeropuerto de El Prat para garantizar la internacionalización de la economía catalana. Y lo peor es que sus concreciones se tantean en forma de globos sonda sin que el Govern haya presentado unos presupuestos que difícilmente verán la luz antes de las elecciones locales del 22 de mayo.

Los recortes son para todos, excepción hecha de las embajadas, más imprescindibles al parecer que el Metro
Artur Mas ya advirtió durante su discurso de investidura de que la vía para salir de la crisis sería dolorosa y CiU llevaba meses, ya antes de las elecciones, cuestionando las cuentas de sus antecesores y su gestión en la Generalitat. Pero ni siquiera esa campaña había advertido al común de los catalanes de la que se le venía encima en forma de recorte presupuestario del 10% lineal, no concretado pero preferentemente centrado en Sanidad y Educación. Sus dos titulares, Boi Ruiz e Irene Rigau, han sido los auténticos protagonistas de estos primeros cien días con sus anuncios tijera en ristre sobre recortes en hospitales y escuelas.

Concierto económico

Una situación que ha hecho especialmente sangrante el último enfrentamiento de la Generalitat con el Gobierno, a cuenta de las exigencias de la vicepresidenta económica, Elena Salgado, al Govern. Cataluña es la comunidad con mayor déficit de largo, y en eso se basa el Ejecutivo socialista para exigirle recortes del 20% en sus presupuestos con el objetivo de dejar el déficit por debajo del 2% en un año. Pero la Generalitat argumenta que es el único ejecutivo que ya está aplicando recortes draconianos del 10%, mientras el Gobierno cubre al resto de los responsables autonómicos, especialmente si son del PSOE, a un mes de las elecciones.

La supresión del Impuesto de Sucesiones ha provocado además las primeras fricciones serias entre CDC y Unió
La nueva crisis entre Gobierno y Generalitat da alas, además, a la reivindicación nacionalista de un nuevo pacto fiscal «con resultado de concierto económico», como apostilla siempre Artur Mas, quien empezó su balance de los cien días en Madrid para dejar claro ante el empresariado que Cataluña «es la Alemania de España» y se ha cansado de pagar. Todo ello aderezado con la consabida advertencia de que no apoyará al próximo gobierno español si no es a cambio de una revisión del modelo de financiación en este sentido.

En clave interna, la crítica situación económica ha llevado a Mas a buscar insistentemente la colaboración del PSC en la elaboración de unos presupuestos que todo el mundo ve ya con temor y en las medidas que a corto y medio plazo tendrá que implementar la Generalitat para frenar su déficit. Pero los enfrentamientos por la herencia recibida del tripartito —cuya batuta económica llevaba el socialista Antoni Castells— y la supresión del impuesto de sucesiones han dado al traste de momento con la ventaja que suponía para CiU un PSC noqueado por la brutal derrota en las urnas y en pleno proceso de descomposición.

De ahí que sólo CiU viera un éxito en las conclusiones de la Cumbre anti crisis presidida por Artur Mas el pasado viernes con boato digno de la Casa Blanca en el Palau de Pedralbes. La oposición en bloque ha sido implacable con unas conclusiones redactadas por el Govern antes de iniciarse el encuentro con las que Mas buscó «apoyos de geometría variable» para saldar el encuentro.

Mas ya ha advertido que no apoyará al próximo gobierno español si no es a cambio de una revisión del modelo de financiación

La supresión del Impuesto de Sucesiones ha provocado además las primeras fricciones serias entre CDC y Unió, después de que el líder socialcristiano, Josep Duran Lleida le robara protagonismo a Mas en el único anuncio positivo de estos inicios de legislatura y proclamara la supresión de esta tasa antes de las municipales. Una afirmación matizada después por el Govern. La polémica sobre el currículo «adornado» de la vicepresidenta Joana Ortega ha agravado esas tensiones, justo cuando los responsables de la federación creían que habían encontrado la fórmula para evitar fricciones con el especialísmo papel otorgado a Duran, quien preside todas las comisiones bilaterales y tutela la política exterior.

Leer aquí: http://www.abc.es/20110404/local-cataluna/abci-cien-dias-bajo-amenaza-201104040935.html