09/12/2010 - EL MUNDO.ES - Estados Unidos - Órdago a Obama de los congresistas demócratas por los recortes de Bush

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Estados Unidos
Órdago a Obama de los congresistas demócratas por los recortes de Bush
Publicado 09/12/2010
Ricard González
Washington

ECONOMÍA | El acuerdo permite renovarlos hasta 2012

* Este jueves los demócratas evitaron que se sometiera a votación la propuesta
* Obama alcanzó con los republicanos un acuerdo sobre la política fiscal de Bush
* Decidieron prorrogar los recortes fiscales a los más ricos hasta 2012
* La decisión de Obama representa un giro en la política del presidente
* Ésta quería hacer permanentes los recortes de impuestos para la clase media
* Pero eliminarlos para aquellos que ingresaran más de 250.000 dólares anuales

Los legisladores demócratas en la Cámara de Representantes demostraron este miércoles que no era una simple floritura retórica su oposición al acuerdo alcanzado por el presidente Obama con los republicanos sobre la renovación temporal de los recortes fiscales de Bush.

El jueves por la mañana una mayoría de demócratas evitaron que se sometiera a votación la propuesta de acuerdo, todo un órdago que pone en duda la autoridad de Obama.

"El mensaje de hoy es muy simple: que en la forma que se ha negociado, no es aceptable para el grupo parlamentario demócrata. Tan simple como eso", declaró tras la votación Chris Van Hollen, erigido en el líder de la rebelión de los congresistas, molestos porque consideran que el acuerdo de Obama con los republicanos se trata más bien de una capitulación. Por su parte, la líder del partido en la Cámara, Nancy Pelosi, mantuvo un perfil bajo, y se limitó a decir en un comunicado que "se continuará negociando".

"Continuaremos intentando trabajar con la Casa Blanca y nuestros colegas republicanos para asegurarnos que hacemos lo que es debido para la economía y el empleo, así como para un paquete equilibrado para el futuro", añadió Van Hollen. Es decir, los congresistas demócratas intentarán modificar los términos del pacto, arrancando concesiones de los republicanos.

Sin embargo, su comportamiento supone sobre todo un órdago a Barack Obama, pues pone en cuestión su autoridad como líder del Partido Demócrata. En caso de triunfar en su pulso con la Casa Blanca, el presidente saldría muy debilitado, ya que sabotearía su deseo de convertirse en el "negociador en jefe" ahora que los republicanos pasarán a controlar la Cámara de Representantes a partir de enero.

Quizás porque desde la Casa Blanca ya se olieron la reacción de los congresistas demócratas, durante el miércoles, su departamento de comunicación hizo públicos casi una veintena de comunicados en los que se anunciaba el apoyo al acuerdo por parte de prominentes políticos demócratas, como el alcalde de Los Angeles, Antonio Villaraigosa, o el senador Jim Webb.

Sorpresa en el hemiciclo

A pesar de que era público y notorio el malestar de muchos congresistas, no se presagiaba que se atreverían a echar un verdadero pulso a Obama, sino más bien que sus declaraciones eran sólo una pataleta. Incluso el número 2 del partido en la Cámara, Steny Hoyer, había declarado unas horas antes que los demócratas no tenían otra opción que no fuera aprobar el pacto.

"Vamos a tener un incremento en impuestos para los trabajadores norteamericanos ... si continuamos con un bloqueo", dijo Hoyer en una entrevista a la cadena MSNBC. No obstante, Van Hollen ya advirtió de la posibilidad de un rechazo a la medida, al afirmar que "el jurado aún no ha decidido". Hasta 54 congresistas escribieron una carta a Nancy Pelosi anunciando su oposición. A la hora de la votación, su número fue mucho mayor, casi unánime.

Los demócratas querrían sólo renovar los recortes de Bush a los ciudadanos con unos ingresos menores a 250.000 dólares, y no a toda la ciudadanía. Pero si el Congreso no actúa antes de fin de año, cuando expiran las rebajas, se volverá a la carga impositiva previa al 2002 para todos los norteamericanos, algo que Obama quiere evitar de todas todas, pues podría hacer caer al país de nuevo en la recesión.

Otro asunto que indigna a los demócratas es que el acuerdo incluya que el impuesto de sucesiones sólo se aplicará a partir de los 5 millones de dólares, y será de sólo 35%. Los demócratas esperaban que el máximo libre de impuestos sería de 3,5 millones, y el tipo impositivo del 45%.

Desde la Casa Blanca se asegura que el acuerdo al que llegaron es el único posible, y que los republicanos no están dispuestos a realizar nuevas concesiones. Así las cosas, es de esperar que durante los próximos días se vivirá una intensa batalla entre republicanos y demócratas que se podría alargar hasta Navidad. Y mientras tanto, otras iniciativas, como el 'Dream Act' o la derogación del 'Don't Ask Don't Tell' pueden ver sus opciones de ser aprobadas complicadas por las rencillas partidistas.

Leer aquí: http://www.elmundo.es/america/2010/12/09/estados_unidos/1291920146.html