06/07/2010 - LA NUEVA ESPAÑA - Asturias - La FADE teme que la subida fiscal de Areces empuje a las empresas a dejar la región

LA NUEVA ESPAÑA
Asturias
La FADE teme que la subida fiscal de Areces empuje a las empresas a dejar la región
Publicado 06/07/2010
Pablo GONZÁLEZ
Oviedo

Las polémicas medidas para corregir el déficit

El PP acusa al Gobierno regional de dar «un nuevo sablazo» que afecta a las clases medias y bajas - Los sindicatos aplauden la medida pero piden que se aumenten los impuestos en todas las comunidades

La subida de impuestos en sus tramos regionales, que ayer empezó a tramitarse en la Junta General del Principado, sólo convence a sus principales artífices, PSOE e IU. La patronal FADE expresó ayer su temor de que si el resto de comunidades autónomas españolas no toman el mismo camino y suben el tramo autonómico, Asturias pueda convertirse en una víctima de la deslocalización de empresas. Esto, advierten, perjudicará a la economía y a los niveles de empleo de la región. Pero ayer surgieron más voces críticas. La oposición, representada por el PP, entiende que el pacto fiscal entre los socios de gobierno supone «un nuevo sablazo» con subidas de impuestos que «afectan a las clases medias y bajas y a las rentas del trabajo». Los sindicatos UGT y CC OO entienden que la solución pasa por una reforma en profundidad del sistema tributario que sólo puede ser afrontada desde el Gobierno central.

Para Severino García Vigón, presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), el Principado ha optado «por el recurso fácil. Fácil y perjudicial, pues la subida de impuestos va a repercutir negativamente en la actividad económica y en el empleo». García Vigón teme que la subida de impuestos como la del IRPF a aquellas personas que ganan más de 90.000 euros al año, perfil al que responden muchos ejecutivos de empresas asentadas en la región,«dañará también la competitividad de la economía asturiana en relación con la de otras regiones que no tomen estas medidas, con el riesgo de deslocalización empresarial, nunca deseable, que ello implica».

Al líder de los empresarios asturianos le cuesta entender cómo el acuerdo alcanzado entre el PSOE e IU incluye subir impuestos por un lado y, a la par, aumentar el gasto de algunas consejerías, en un claro mensaje hacia los departamentos en manos de la coalición de izquierdas. «Este acuerdo de subir los impuestos se ha visto acompañado de un mayor gasto en algunas consejerías», apunta Vigón.

El responsable de FADE entiende que antes de optar por subir los impuestos a las rentas más altas, elevar tasas como la de las transmisiones patrimoniales (que en su mayoría afectan a la compraventa de vivienda de segunda mano) o la del impuesto de donaciones y sucesiones, el Principado debería tratar de poner freno al elevado coste que supone su política de personal para las arcas públicas regionales. «Creemos, en cambio, que no se han explorado todas las posibilidades de introducir medidas de austeridad y eficacia en el gasto. En este punto conviene recordar que el personal al servicio de las administraciones del Principado de Asturias, descontados los transferidos del Ministerio de Justicia, se incrementó en 2.318 personas desde enero de 2007 a junio de 2009 (datos del Gobierno de España) con el siguiente desglose: Principado, 1.898; ayuntamientos, 203, y Universidad, 217. Además, el gasto consolidado en personal alcanza los 1.661 millones de euros en 2010. Esta cifra supone un 36% del presupuesto regional, incrementándose el 23% desde 2007. Incluso descontando por estimación unos 37 millones de euros de las transferencias de justicia el aumento sería del 20%», desgranó García Vigón. Y sentenció: «Con independencia de su valoración comparativa, esos datos invitan a la reflexión, ya que la oferta pública de empleo no puede ser un fin en sí misma y mucho menos en tiempo de crisis».

Por su parte, desde UGT, Mar Celemín, secretaria de acción sindical, considera que las medidas fiscales adoptadas por Areces «son necesarias porque el déficit no sólo se combate rebajando sueldos. No es suficiente. Lo que hace falta es una reforma fiscal en profundidad en la que domine la progresividad, la eficiencia y la equidad». Por eso Celemín entiende que debe ser Zapatero el que tome la decisión y evitar así que «existan diecisiete modelos fiscales distintos».

Gilberto García, secretario de Política de Desarrollo de CC OO, también apuesta por una reforma nacional del sistema tributario y considera que la acordada entre PSOE e IU en Asturias «no tendrá una incidencia económica excesiva». Este representante de Comisiones Obreras entiende que hay «un desequilibrio entre las rentas del trabajo y las del capital que hay que corregir» y que debe «perseguirse el fraude fiscal».

Mientras, las fuerzas políticas regionales ofrecieron su versión sobre la subida de los impuestos ayer en el Parlamento asturiano durante una sesión en la que se rechazó una enmienda a la totalidad del PP al decreto que incluye el incremento impositivo y el recorte de los sueldos de los funcionarios. La abstención de IU sirvió para que los votos en contra del PSOE tumbasen la enmienda popular. El viernes habrá un Pleno extraordinario en el que se aprobará el texto definitivo de la ley ya pactado por PSOE e IU.

Así, el PP, a través de su diputada Alejandra Cuétara, acusó al Gobierno de Areces «de ir de sablazo en sablazo», de considerar como enemigos a «funcionarios y contribuyentes» y de subir impuestos que «afectan a las clases medias y bajas y a las rentas del capital». Cuétara aseguró que «hay otras formas de eliminar el déficit público» y puso sobre la mesa el discurso del PP sobre la necesidad de recortar el sector público. La parlamentaria aseguró que el Gobierno utiliza las empresas públicas, a las que tildó de «administración paralela», para «ocultar más de 560 millones de euros de deuda».

Y Jesús Iglesias (IU) acusó al PP de recetar «cura de caballo para acabar con el déficit en tres años reduciendo el gasto social, lo mismo que defiende Zapatero». Desde las filas socialistas, el diputado Álvaro Álvarez subrayó que el recorte del sueldo a los funcionarios es de obligado cumplimiento en todo el Estado, y barajó que la apuesta del PP por empresas públicas para privatizarlas pueda deberse «a que así escapan al control público para poder establecer en ellas redes de amiguismo o comisiones».

Desde el pasado jueves, que el Parlamento asturiano va a aprobar la subida de impuestos y el recorte de sueldos de la parte autonómica de la nómina de los funcionarios es todo un hecho. Aquel día se cerró el acuerdo entre el PSOE e IU para que la coalición se abstuviera en la votación sobre el decreto de ley para reducir el déficit y el gasto público.

Pero el acuerdo aún quedaba plasmarlo en la Junta. Y ayer se dio el primer paso, pero no libre de sobresaltos. Primero, los sindicatos de funcionarios recibieron con eslóganes y pitidos a los parlamentarios a su llegada a la Junta. Luego, y durante cinco minutos, lograron parar el Pleno exhibiendo pancartas en las que podían leerse frases como: «Los empleados públicos no somos mercancía», «Esta democracia no funciona», «No recortes» o «Democracia secuestrada». La sesión prosiguió después de que la Policía expulsase a los sindicalistas.

Muchos de estos sindicatos denuncian cómo el Gobierno ha centrado el recorte en sus trabajadores pero no es sus altos cargos. «Que empiecen por los de arriba», aseguraba la representante del sindicato médico USAE, María José Fernández. Antonio Matador, responsable del Simpa, pidió que se recorte el número de asesores con los que cuentan los miembros del Gobierno y las empresas públicas, así como reducir el número de consejerías. Según Matador, «sobran las consejerías de Salud que hay en toda España. Bastaría con un Ministerio como debe ser». Desde otros frentes, como el de educación, Gumersindo Rodríguez, de ANPE, aventuraba que el recorte «no le va a salir gratis a este Gobierno».

José Luis González, de USIPA, acusó a IU «de habernos utilizado y vendido por unos sillones que parecen ser muy cómodos. ¿Es esto la izquierda?», y tildó al líder de la coalición, Jesús Iglesias, de «mentiroso» y «sinvergüenza».

Leer aquí: http://www.lne.es/asturias/2010/07/06/fade-teme-subida-fiscal-areces-empuje-empresas-region/938939.html