23/09/2009 - EXPANSIÓN - Economía y política - El Gobierno cede ante Montilla y ataca las rebajas fiscales de Esperanza Aguirre

EXPANSIÓN
Economía y política
El Gobierno cede ante Montilla y ataca las rebajas fiscales de Esperanza Aguirre
Publicado 23/09/2009
C. Cuesta, D. Gracia

La reforma de la financiación autonómica sigue deparando sustos. El texto definitivo remitido a Las Cortes se configura como un ataque contra las rebajas fiscales abordadas por las comunidades populares y encabezadas por Esperanza Aguirre en Madrid.

Las rebajas de Sucesiones y Donaciones se descontarán de los fondos que perciban las autonomías. Pero, sobre todo, las personas que pretendiesen acogerse a estos incentivos pueden tener que acabar pagando el impuesto. La reforma, tal y como plasma el articulado, dificulta la capacidad de las autonomías para competir por la captación de patrimonios y sucesiones por medio de una fiscalidad más atractiva.

En medio de este escenario no debe olvidarse la batalla abierta por Cataluña contra la supresión de los tributos de Sucesiones y Donaciones encabezadas por la Comunidad de Madrid y continuadas por otros territorios. Cataluña y Extremadura son las únicas dos regiones que apenas han modificado estos impuestos, según el Registro de Economistas y Asesores Fiscales.

La Generalitat cree que esta carrera provoca "dumping fiscal" entre regiones y que atacaban al esquema de solidaridad nacional. De fondo se encuentra la certeza de que un buen número de contribuyentes se han desplazado de las comunidades más caras fiscalmente para cobijarse en territorios con menores impuestos.

Terreno para la disputa

La reforma deja el terreno abierto a una pelea entre autonomías por el dinero de los contribuyentes y entre las autonomías afectadas y el propio Estado. Bajo el principio de que "no producirán efecto los cambios de residencia que tengan por objeto principal lograr una menor tributación efectiva en los tributos total o parcialmente cedidos", el nuevo texto endurece el requisito para poder acogerse a la tributación reducida de las autonomías con menos impuestos en Sucesiones y Donaciones.

Así, hasta ahora, tan sólo era necesario permanecer un año en un territorio para tributar en él por estos impuestos. A partir de ahora, esta exigencia pasará a cinco. Este plazo, supone que autonomías como Cataluña ganan un tiempo que puede ser decisivo para pelear por hacerse con el pago fiscal de patrimonios que ya se han desplazado a Murcia, Madrid o Valencia, por ejemplo, para beneficiarse de los incentivos en el Impuesto de Sucesiones.

El Gobierno podrá aplicar aquí la potestad que ostenta de que "la Inspección General del Ministerio de Economía y Hacienda" realice "anualmente una inspección de los servicios" y presente un "informe sobre el modo y la eficacia en el desarrollo de las diversas competencias asumidas por la comunidad autónoma de que se trate respecto a los tributos cuyo rendimiento se cede", garantizándose el control de la actuación de las haciendas regionales.

-La Generalitat podrá pelear por el pago fiscal de los patrimonios ya fugados-

Las autonomías que se consideren competentes, es decir, tanto la región a donde llega el contribuyente, como de la que se fue, si así lo considera, podrán reclamar el pago del impuesto, puesto que "corresponderá a la autoridad competente de la comunidad respectiva poner en conocimiento del Ministerio Fiscal los hechos que estime constitutivos de delitos contra la Hacienda Pública con arreglo al Código Penal" respecto al conjunto de tributos propios.

Sin margen para espacios fiscales más atractivos

El Gobierno se propuso con la reforma de la financiación dos objetivos: por un lado, ampliar la autonomía fiscal de las comunidades, esto es, su capacidad para financiarse a partir de recursos propios; y, por otro, dotar de más responsabilidad normativa a los ejecutivos regionales, es decir, darles poder para subir y bajar los impuestos.

No obstante, el articulado de la nueva LOFCA remitido a las Cortes pone obstáculos a la carrera entre regiones para crear espacios económicos más atractivos. En concreto, el Gobierno se agarra al principio por el "en el ejercicio de las competencias normativas, las Comunidades Autónomas [...] no adoptarán medidas que discriminen [entre territorios] por razón del lugar de ubicación de los bienes, de procedencia de las rentas, de realización del gasto, de la prestación de los servicios o de celebración de los negocios, actos o hechos, y mantendrán una presión fiscal efectiva global equivalente a la del resto del territorio nacional".

Una pauta que ahora se convierte en una brecha al ataque a las rebajas fiscales, ante la presión ejercida por Cataluña contra las reducciones fiscales de gran parte del resto de autonomías. Con la reforma, en la práctica, las autonomías ganan capacidad para subir casi todos los impuestos propios y cedidos. Por ejemplo, para ampliar el poder normativo sobre los mínimos, la tarifa y las deducciones del IRPF o para ganar recaudación a través de impuestos especiales.

Leer aquí: http://www.expansion.com/2009/09/22/economia-politica/1253654991.html