09/11/2010 - EXPANSIÓN.COM - Cataluña - CiU y ERC defienden el concierto, que el resto de partidos no ve viable

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Cataluña
CiU y ERC defienden el concierto, que el resto de partidos no ve viable
Publicado 09/11/2010
M. Saballs / N. Araguás / B. García
Barcelona

Convergentes y populares se comprometen a revertir las subidas de impuestos del tripartito. Los partidos en el Gobierno critican al resto por sembrar dudas sobre la solvencia catalana.

CiU abanderó ayer la defensa del concierto económico para Cataluña, del cual ERC también es partidaria como un “paso transitorio” hacia “la ruptura de la relación financiera con el Estado”. En el debate organizado por EXPANSIÓN con los responsables de economía de los partidos con representación parlamentaria que concurren a las elecciones autonómicas, Felip Puig (CiU) defendió que la crisis “exige una respuesta más radical al no retorno del 10% del esfuerzo fiscal de Cataluña”.

Maria Àngels Cabasés (ERC) recordó que su partido reclama el concierto desde “hace 15 años”, aunque conseguirlo sólo será posible con un “pacto político” con los dos grandes partidos (PSOE y PP): “Rajoy ya ha dicho que es inviable”, advirtió. Enric Millo (PPC) no cerró la puerta a abordar este debate en un futuro, aunque fijó como prioridad la recuperación.

Por su parte, Rocío Martínez-Sampere (PSC), Daniel Pi (ICV-EUiA) y Antonio Espinosa (Ciudadanos) defendieron el actual modelo de financiación autonómica, que el Congreso aprobó en 2009.

“A parte del encaje jurídico, ¿de cuánto dinero habla CiU?”, inquirió Martínez-Sampere a Puig. La socialista comparó el concierto “con una caja muy bonita, que la abres y no hay nada”. En esta línea, Pi recordó que “la situación ha mejorado con la financiación actual y Mas en privado lo reconoce”. Según el ecosocialista, el problema no es el modelo sino que el Estado, en su relación económica con Cataluña, se ha comportado “de manera rancia, cicatera y desleal”.

Para Millo, el “gran avance de financiación” se produjo en 2001, gracias al acuerdo entre PP –“que gobernaba con mayoría absoluta”– y CiU. Luego, los partidos catalanes “se enfrascaron en el Estatut, en vez de concentrarse en la mejora de la financiación”, lamentó. Según el popular, eso fue “un fracaso” y ha derivado en “una subida de impuestos”, como pronosticó su partido. “En el futuro será decisivo que haya un papel importante del PP en las negociaciones”, advirtió.

Tanto el PP como CiU se comprometen a revertir las subidas de impuestos. “Rebajaremos el AJD (Actos Jurídicos Documentados), el ITP (Transmisiones Patrimoniales), el IRPF y el céntimo sanitario; además, queremos eliminar Sucesiones y Donaciones”, avisó Puig, quien levantó la bandera de la moderación fiscal. “Hay margen para hacerlo con una política de moderación fiscal y de prioridades en el gasto, algo que no ha ocurrido en los últimos años”, añadió.

Martínez-Sampere atacó el concepto ideologizado de “moderación fiscal”. “Tenemos una presión fiscal baja en relación a Europa. Los tipos nominales son elevados, pero luego hay una plétora de deducciones e incentivos que hacen que el tipo efectivo sea bajo”, justificó.

Tanto ERC como ICV criticaron la propuesta de CiU. “Si alguien dice que va a bajar Sucesiones y Donaciones no me lo creo”, afirmó Cabasés. Pi coincidió: “el tripartito lo ha reducido al 94%, pero nadie puede decir que quitarlo es prioritario con la que está cayendo”, dijo.

Millo explicó que quiere rebajar el IRPF y crear incentivos fiscales para los emprendedores. “Hay que ensanchar la base tributaria; que muchos paguen menos, y no que pocos paguen mucho como ocurre”, dijo. “La capacidad tributaria de la Generalitat, que tanto defienden, no la han usado en el buen camino desde que la obtuvieron hace nueve años”, añadió. Pi discrepó: “decir que se bajarán los impuestos pero que subirá la recaudación, es un buen eslogan, pero económicamente inviable”, expuso.

Solvencia catalana

Martínez-Sampere, criticó a CiU por poner en duda la solvencia de la Generalitat durante la polémica emisión de bonos minoristas. “Estamos abriendo el mercado de los bonos minoristas, por lo que es normal que sea caro, pero hay que practicar la confianza que muchos predican”, expuso la socialista.

Para Puig, la emisión de bonos deja al descubierto que el Gobierno catalán gasta más de lo que ingresa. “Si alguien pone en duda su solvencia son las agencias de calificación como Moody’s”.

Millo añadió que el problema de la Generalitat es que se endeudó para “pagar más deuda, y no para nuevas inversiones y servicios; y eso no es la mejor manera para gestionar los fondos públicos. “Si hubieran escuchado nuestros planes de austeridad habríamos ahorrado 4.000 millones en tres años, y no estaríamos así”, dijo. Martínez-Sampere defendió un plan de austeridad con el que se ha ahorrado 1.670 millones”. Cabasès añadió: “el déficit fiscal catalán es de 20.000 millones”.

Financiación

PSC, ICV-EUiA y Ciudadanos (C’s) son partidarios del actual sistema de financiación autonómica que, según Martínez-Sampere”sitúa a Cataluña a niveles similares a la República Federal de Alemania”. Para Puig (CiU), esto no es así: “si el límite es el de los länder alemanes, de un 4% de déficit fiscal, perfecto”, expuso. Antonio Espinosa (C’s) se declaró a favor de “eliminar el concierto vasco, que es un privilegio de 3.000 millones”.

Remontar la crisis

“Necesitamos una administración amiga de los negocios que se instaure en la austeridad más radical”, dijo Puig, una receta que comparte el PPC. Martínez-Sampere abogó por reformar la administración, el sistema financiero y el sector energético. Cabasés prioriza “cambiar el modelo productivo” y Pi “atacar” los problemas de financiación. El equilibrio presupuestario, ayudar a los emprendedores y eliminar trabas burocráticas son las claves para Millo.

Administración

El tripartito ha aumentado en 80.000 el número de funcionarios en una legislatura y pagar sus nóminas ha supuesto 2.400 millones de euros, criticó Puig. PSC, ICV-EUiA y ERC defienden que el margen para adelgazar el sector público es limitado y recuerdan el aumento de población de Cataluña en los últimos cuatro años. “Niego la mayor de la afirmación de Puig”, aseguró Pi. Espinosa destacó que el Estado del bienestar no debe resentirse.

Compra de bonos

De los seis participantes en el debate, tres han hecho una reserva de bonos minoristas de la Generalitat: Cabasès, Pi y Espinosa. En cambio, Puig, Sampere y Millo no lo han hecho. Espinosa considera que esta colocación “ha sido una necesidad, porque si se mejora la gestión no habrá problemas para devolverlo el año que viene”, dice. Tanto Pi como Sampere asumen que “las condiciones de ingresos cambiarán el año que viene y no habrá tanto vencimiento a pagar”, afirman.

Leer aquí: http://www.expansion.com/2010/11/08/catalunya/1289253382.html?a=ALT54c1b37a528c45beb46969082c4953c0&t=1289284569