22/12/2009 - ABC.ES - Catalunya - Arriba y abajo

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Arriba y abajo
Publicado 21/12/2009

EL MENTIDERO
RECUERDAN aquella famosa serie inglesa «Arriba y abajo»? Los matices y sutilezas de sus guionistas estaban a años luz de los farisaicos discursos sobre ricos y pobres que hemos escuchado estos días con motivo de la edulcorada rebaja del impuesto de sucesiones. La memorable frase de Groucho Marx «estos son mis principios, pero si no le gustan tengo otros» podría aplicarse a algunos dirigentes de la izquierda que, una vez han pasado por el tamiz del poder, relativizan todos sus dogmas.

Hace unos meses, el ex secretario de Comunicación del Gobierno, Fernando Moraleda, mantuvo un almuerzo con un nacionalista en un restaurante de lujo de Madrid. El diputado socialista por Ciudad Real aseguró, para pasmo de su compañero de mesa, que él frecuentaba ese tipo de establecimientos para «representar a la clase media». Sostiene Moraleda que, gracias a la izquierda, el ciudadano de a pie puede darse un homenaje culinario de esas características. ¿No será más cierto que, gracias a tener un cargo público, un comunista como Jordi Miralles puede desplazarse en coche oficial al puerto deportivo donde tiene amarrado su velero?

Acostumbrarse a lo bueno resulta fácil. El ex alcalde de Terrassa, Manuel Royes, era conocido como «Manuel no hi és» entre los egarenses porque pasaba la mayor parte del tiempo en su casa de Matadepera, posiblemente la ciudad española con más «pijos» por metro cuadrado. Su compañero de partido, el socialista Celestino Corbacho, también abandonó L´Hospitalet de Llobregat en cuanto tuvo poder y recursos para vivir en Sant Cugat del Vall_s.

Pero una cosa es el colectivo de nuevos ricos y otra, el de los burgueses. Aquí las influencias se utilizan, no tanto para tener cosas materiales, que también, como para lograr pedigrí, algo que hasta hace muy poco concedían en Barcelona tipos como Millet, con barra libre en el Círculo del Liceo, en el Círculo Ecuestre y en el más selecto aún Círculo de Desposeídos de la Creu de Sant Jordi..

Mientras, a los pobres sólo nos queda confiar en que nos toque la lotería de Navidad que se celebra mañana. Aunque, según me cuenta un diputado de CDC, es mejor no fiarse de las loterías catalanas. Pero eso es una historia muy larga. De momento nos quedamos con el parecido de la directora general del Juego y de Espectáculos de la Generalitat, Merc_ Claramunt, con la actriz que imita a Esperanza Aguirre en el programa de TV3 «Polònia».

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