17/12/2009 - La segunda - Un mal acuerdo

LA VANGUARDIA
La segunda
Un mal acuerdo
Publicado 17/12/2009. Edición impresa, pág. 2.
José Antich - DIRECTOR

LOS tres socios del Gobierno catalán cerraron ayer un acuerdo sobre la reforma del impuesto de sucesiones que debería dejar un sabor amargo al PSC y a Esquerra por las concesiones que han tenido que hacer hacia su socio pequeño, ICV. Y ello porque deja a los ciudadanos que liquidan este tributo en la comunidad autónoma de Catalunya muy lejos de lo que sucede en otras zonas de España, desde aquellas gobernadas por el PP, como Madrid o Valencia, a las que tienen presidentes socialistas, como Castilla-La Mancha o el País Vasco. A la lista de estas cuatro comunidades podrían sumarse otras, pero nada cambiaría la foto territorial de liquidación del impuesto. A la vista del resultado final, parece evidente que tanto PSC como Esquerra han preferido un acuerdo rebajado con ICV que explorar otros caminos que los hubieran situado en la práctica desaparición del impuesto, como reclamaban tanto CiU como el PP. En el caso de los republicanos, hay razones para que la decisión sea más dolorosa, ya que el pasado día 15 de septiembre sus diputados en el Congreso de los Diputados sí votaron a favor de la toma en consideración de una proposición de ley que planteaba la supresión del impuesto en toda España para los familiares directos. Es cierto que en aquella ocasión no tenía una afectación directa sobre el Govern y quizás por ello pudieron unir sus votos a los de los diputados del PP, CiU, PNV y Coalición Canaria. Es evidente que, con la decisión de ayer, la reforma del impuesto de sucesiones da un insuficiente primer paso y deja un amplio camino para ser más ambiciosos en el futuro. Aunque la ambición, en este caso, tenga un carácter uniformador.

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